«El Poder del Compromiso: Cómo tomar decisiones definitivas para transformar tu vida»
¿A qué nos comprometemos?
El compromiso es una decisión consciente que tomamos y mantenemos en el tiempo, independientemente de los resultados. Las acciones que elegimos están en armonía con nuestra intención, es decir, no asumimos compromisos que no tengan un significado profundo para nosotros, o algún beneficio oculto o no en nuestro subconsciente.
Podemos comprometernos a no hacer algo específico, o a ser de una determinada manera. Algunos detalles que lo caracterizan podrían ser:
- El compromiso no se puede medir. Es un estado del Ser, o una forma de Ser que deseamos crear en nuestra vida. Por ejemplo, «me comprometo a disfrutar más de mí mismo, y preocuparme menos por lo que tengo que hacer». Mientras no estemos comprometidos, surgirán dudas.
- Cuando asumimos un compromiso de manera definitiva, comenzamos a tomar acciones, que nos acercan con aquello que nos hemos comprometido.
- El compromiso es diferente a una meta. Las metas son específicas, y tienen un momento en el tiempo en el que se supone que se alcanzarán.
- Los compromisos que nos proponemos y cumplimos, ayudan a elevar nuestro nivel de confianza en nosotros mismos. Nos hacen crecer y sentirnos satisfechos.
- El compromiso que adquirimos con nosotros mismos para alcanzar un objetivo implica negociación y honestidad con la única persona capaz de deshacerlo… tú.
- Cuando no llegamos a cumplir, un determinado compromiso, y debemos renegociar o cambiarlos, entramos en conflicto con nosotros mismos y quizás con otros. Son estos momentos, los que nos permiten aprender, y crecer en el conocimiento con nuestros limites.
Recapitula y observa que compromisos tienes hoy en día
Muchas veces estamos inmersos en mares de compromisos, sin saber como hemos llegado hasta allí. esto ocurre porque vamos con prisas diciendo SI a todo lo que nos proponen, sin tomar en cuenta si realmente podemos o queremos hacerlo.
Toma un momento y escribe a que personas o situaciones has dicho SI, generando un compromiso:
1.- Compromisos contigo mismo. Aquellos que has cumplido y aquellos que no. ¿Qué es eso que dijiste que ibas a hacer y lo has pospuesto? Por ejemplo, si te has comprometido a levantarte a una hora determinada, pero en este momento no tiene sentido para ti, quizás sea el momento de cambiarlo.
2.- Haz una lista de lo que te ha dado fuerza para seguir adelante. Esta autoindagación te permitirá identificar tus debilidades y fortalezas. Reconocerlas es el primer paso para poder cambiar, mantener o modificar los compromisos que te has hecho a ti mismo.
3.- Compromisos adquiridos con otros. Observa, que es eso que ya no deseas mantener. Puede ser que sientas que te impusieron esos compromisos o que los asumiste sin pensar. En este caso, reflexiona sobre tus respuestas. Ten en cuenta que fuiste tú quien decidió decir sí o no, o quien eligió no responder, pero aun así asumió el compromiso. Una vez que tengas claridad al respecto, renegocia con las personas involucradas o contigo mismo. Establece nuevos compromisos o renegocia los actuales.
Estas acciones te permiten evaluar en qué situación te encuentras en estos momentos, que dejar atrás, o que modificar, es así como comienzas a Hacerte Cargo de conocerte mejor.
Espero que te sirva.